Desde hace algunos años ha ido incrementando la concientización de las personas respecto de la importancia de cuidar el medioambiente. Y esto se ha reflejado en políticas públicas provenientes del Estado orientadas en preservar el mar, los bosques y otros entornos naturales. Asimismo, cada vez más empresas ofrecen productos y servicios amigables con el medioambiente y cambian sus procesos de producción a unos menos contaminantes.
¿Pero cuál es la razón por la que ha crecido este interés en proteger el medioambiente? Para ofrecer una respuesta, primero debemos comprender qué es el medioambiente. Y a continuación, ofrecemos una definición.
¿Qué es el medioambiente?
De acuerdo con el Diccionario panhispánico de dudas del la Real Academia Española, se define a esta palabra como “conjunto de circunstancias o condiciones exteriores a un ser vivo que influyen en su desarrollo y en sus actividades”. En otras palabras, se trata de todo aquello que nos rodea y que condiciona nuestra vida.
¿Y qué podemos encontrar a nuestro alrededor? Plantas, suelo, aire, animales, agua, entre otros. Gracias a todo ello, como seres humanos podemos desarrollarnos, alimentarnos, reproducirnos, crecer o beber. Es decir, debido a ese entorno ideal es que la vida humana se vuelve posible.
Ahora que tenemos un mejor conocimiento de qué es el medioambiente y una idea general de cómo influye en nuestra vida, profundizaremos en este último aspecto para reconocer la importancia de cuidar y proteger el medioambiente.
1. Respiramos el oxígeno del aire
Cuando nos referimos a “respiramos”, no solo hacemos mención al ser humano, sino a todo ser vivo de este planeta: animales, insectos y plantas. El oxígeno del aire es un elemento esencial para la vida. Sin él, simplemente no sería posible la vida en la Tierra.
Sin embargo, en las ciudades no solemos respirar aire puro y limpio, sino uno contaminado con partículas sólidas y otros gases perjudiciales, como el monóxido de carbono. Esto se debe principalmemte a la quema de combustibles fósiles.
Según información de la Organización Mundial de la Salud, una de cada nueve muertes en todo el mundo es el resultado de condiciones relacionadas con la contaminación atmosférica. Las personas con enfermedades previas, los niños menores de cinco años y los adultos entre 50 y 75 años de edad son los más afectados.
Por eso, es fundamental reducir la contaminación del aire para proporcionar beneficios a la salud e incluso para la producción agrícola al reducir lo efectos de gases contaminantes que ponen en riesgo la seguridad alimentaria, como el carbono negro.
2. El agua: fuente de la vida
Al igual que el oxígeno, el agua es un elemento responsable de la posibilidad de desarrollo de las distintas formas de vida: vegetales, animales y el ser humano.
A pesar de ello, uno de los grandes problemas en el cuidado del madioambiente es es la contaminación del agua causado por los residuos vertidos, los fertilizantes, pesticidas o químicos que desembocan en las aguas dulces y que acaban por contaminar también el agua salada.
El agua es necesaria para cultivar y procesar alimentos y para la vida diaria del hombre: lavar la ropa, bañarse, cocinar, beber, limpiar. A pesar de ello, la gestión inadecuada de las aguas residuales urbanas, industriales y agrícolas, conlleva a que el agua que utilicen cientos de millones de personas se vea peligrosamente contaminada químicamente.
Por estas razones, es importante buscar soluciones a las formas de contaminación para preservar el agua. Así, podremos usarla para la alimentación y la higiene y para mantener vivas todas las especies de plantas y animales.
La contaminación ambiental e hídrica causan múltiples problemas al medioambiente y ponen en riesgo de la vida de plantas y animales, que a su vez son fuente de alimentación del ser humano.