Probablemente estés buscando una dieta que te ayude a mantener tu cuerpo en excelentes condiciones. Una dieta llena de grasas saludables, proteínas y una variedad de micronutrientes, en donde las semillas sean tu arma secreta para comer mejor que nunca.
A continuación queremos compartir contigo 3 de las semillas que han fortalecido a muchas culturas alrededor del mundo durante muchos años. ¡Es momento de añadirlas a tu dieta!
Chía
Las semillas de chía son una fuente importante de fibra, una sola cucharada equivale a 5 gramos. Cuando la fibra de esta semilla se mezcla con los líquidos digestivos de tu estómago, ésta se incrementa y forma un gel, el cual ayuda a mejorar los niveles de azúcar en la sangre y promueve la sensación de saciedad.
Asimismo, la chía es una buena fuente de ácidos grasos omega 3 para mantener un corazón saludable. Por otro lado, la chía no es considerada como una proteína “completa”, ya que contiene niveles bajos del esencial aminoácido lisina. Estudios recientes demostraron que la chía cuenta con grandes propiedades antioxidantes que ayudan a defender a las células de los dañinos radicales libres.
Esta semilla cuenta con un sabor muy agradable, puedes agregarlo a tu yogurt, cereal, requesón, ensaladas, entre otros y lo mejor es que no altera el sabor de la comida. La chía es considerada hidrófila, ya que absorbe grandes niveles de agua. El gel de de esta semilla también es utilizado dentro de la comida vegana, el cual reemplaza a las propiedades de los huevos.
Semillas de cáñamo
Estas semillas cuentan con un gran nivel de minerales vitales, incluyendo hierro, calcio y magnesio. Asimismo, contienen una gran cantidad de aminoácidos esenciales, que se encuentran en la carne, huevos y lácteos; y que ayudan en gran medida en la formación de tus músculos. Científicos de la Universidad de Harvard, afirman que el consumir grandes cantidades de magnesio, está asociado a un 30% menos de probabilidad de riesgo de una enfermedad cardiovascular. De igual manera, las semillas de cáñamo contienen diferentes niveles de grasa omega, que sirven como buenos antiflamatorios para el cuerpo.
Linaza
La linaza es una de las principales fuentes de fibra soluble. El consumo de linaza ayuda a regular la digestión, el nivel de azúcar en la sangre y el apetito. Además, es una gran fuente de omega 3. Según muchos estudios realizados durante el año 2015, el consumo de linaza ayuda a mantener el nivel de azúcar de la sangre estable y a la vez ayuda a evitar las enfermedades cardiovasculares. Este mecanismo biológico, está relacionado a los altos niveles de lignanos que se encuentran en estas semillas y que ayudan a una mejor circulación de la sangre.
